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El phishing es una técnica de suplantación de identidad que se utiliza para robar información confidencial como contraseñas, números de tarjetas de crédito, entre otros datos importantes. La mayoría de las veces, los phishers utilizan correos electrónicos y sitios web falsos para engañar a las personas y hacerlas caer en sus trampas.
El problema es que el phishing puede ser muy difícil de detectar, ya que los phishers utilizan técnicas muy sofisticadas para parecer legítimos. Pueden enviar correos electrónicos desde direcciones de correo electrónico falsas que parecen ser de empresas legítimas, y también pueden crear sitios web falsos que parecen idénticos a los sitios web reales.
Entonces, ¿cómo se protege uno del phishing?
La respuesta más sencilla es tener sentido común. Si un correo electrónico parece sospechoso, no lo abras. Si un sitio web parece extraño o no funciona correctamente, no ingreses tus datos. También debes ser cauteloso al hacer clic en enlaces en correos electrónicos o en línea.
Otra cosa importante a tener en cuenta es la autenticación de dos factores. Muchos servicios en línea ahora ofrecen la autenticación de dos factores, que es cuando se te solicita un segundo factor de autenticación (generalmente un código enviado a tu teléfono) además de tu contraseña para iniciar sesión. Esto hace que sea mucho más difícil para los phishers obtener acceso a tus cuentas.
Por último, es importante tener un buen software de seguridad en tu PC o dispositivo móvil. Un buen software de seguridad puede detectar y bloquear el phishing antes de que tenga la oportunidad de hacer cualquier daño.
En resumen, el phishing es una amenaza muy real y debes estar siempre alerta si no quieres ser una víctima. Toma medidas para proteger tus datos personales y utiliza el sentido común en línea. Y no te olvides de tener una buena seguridad en tus dispositivos para asegurarte de que siempre estás protegido.
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